Ayudar a los demás es una de las características que nos hace humanos, ese sentimiento de querer hacer algo bueno por los demás, apoyar a nuestros sobrinos con sus deberes o incluso aconsejar a tus amigos con problemas en el amor son formas de ayudar. Está dentro de todos nosotros, y no es algo que se pueda negar tan fácilmente, nos mostramos empáticos y queremos ser solidarios en pro de mejorar el mundo, o al menos, el mundo de algunas personas.

Es justamente esa empatía la que nos hace ponernos en los zapatos de los demás y nos da la posibilidad de sentir su deseo por cumplir un sueño, de satisfacer una necesidad o dar un paso más en el camino a esa meta que tienen en mente.

En el día a día estamos rodeados de oportunidades, eventos y causas para ayudar a quien lo necesita. Todos podemos ser parte del cambio aportando de diferentes formas, hoy veremos 3 ideas de cómo ayudar a los demás con las características que nos hacen únicos.

 

Tres ideas prácticas para ayudar a los demás 

1. Donar tu tiempo

Como agentes del cambio y futuro de nuestro país, tenemos una gran opción para aportar y lograr una diferencia en la vida de quién más lo necesita y es el tiempo. Donarlo a una causa en favor de la educación, del medio ambiente o de la comunidad es tan valioso por su poder en la transformación en la sociedad. Estas son algunas formas en las que podríamos donar nuestro tiempo:

  • Colabora como voluntario en proyectos a beneficio de la naturaleza, la educación o calidad de vida de una comunidad.
  • Reúnete con colegas, amigos o familiares para descubrir nuevas maneras de ayudar en un área determinada y ponlas en marcha.
  • Participa en jornadas de limpieza de áreas públicas, playas, bosques y parques naturales.

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La grandeza de hacer voluntariado

Le daremos una especial atención a este hermoso servicio por su naturaleza altruista, algunos incluso dicen que es la virtud de ayudar con el corazón. Existe un amplio espectro de opciones para unirte en el voluntariado, desde la conservación y rescate de cientos de especies animales hasta llevar educación a niños que viven a decenas de kilómetros de la escuela más cercana. 

El voluntariado no es algo que sea determinado para algún grupo específico de personas, estudiantes en todo el mundo sin distinción social, racial o de género, transforman el mundo desde el voluntariado. Eso sí, la acción que realicemos debe perseguir el bien común y beneficiar de forma directa o indirecta a personas ajenas a nuestra familia, o bien, realizarse en favor de una causa.

Además, no importa que carrera universitaria estés cursando ya que todos comparten el mismo objetivo: Cambiar al mundo desde su acción desinteresada y llena de amor por la vida del otro, por los demás, por el mundo en sí.

 

“El propósito de la vida humana es servir y mostrar compasión y la voluntad de ayudar a otros”. -Albert Scheweitzer  

 

¿Dónde puedes encontrar una causa para brindar tiempo? 

Como estudiante puedes acercarte a tu institución, familia o amigos y seguramente alguno de ellos conocerán al menos una causa para apoyar. Tan solo debes dar el primer paso preguntando, investigando o hablando del tema. 

Recuerda que acciones tan naturales como invertir tu tiempo en una persona para que pueda mejorar en sus estudios ¡también son parte fundamental de esta idea!

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2. Comparte tu talento

El talento es para compartirse, brinda tu conocimiento o experiencia para hacer que las cosas sucedan o para ayudar a quien pueda crecer gracias a ello.

La experiencia de compartir tu riqueza interior es dar luz y abrir nuevas posibilidades para mejorar algo o salir adelante de una situación difícil, es dejar una pequeña parte de ti en otros.

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3. Impulsa causas, contribuye donando tesoro

Las sociedades en el mundo no tienen las mismas condiciones socioeconómicas, esto nos presenta un panorama donde cierta cantidad de la población no tiene los recursos suficientes para cumplir algunas de sus necesidades básicas, por ejemplo, la educación. 

Es ahí donde podemos donar desde cantidades pequeñas de tesoro, hasta grandes sumas: todos los tesoros ayudan. Esto no limita la posibilidad de poner en práctica las otras dos ideas, hablarle a nuestros familiares y amigos para tener más posibilidad de ayudar, tener un corazón de servicio expresado desde el desapego del dinero y la priorización de nuestra felicidad al ver a nuestro prójimo crecer desde cualquier aspecto.

Donar tu tesoro es, en la mayoría de las veces, sencillo y seguro, ya que diversas instituciones educativas cuentan con excelentes programas de ayuda, becas, estímulos y causas que ayudan a la población. 

Investigar a qué causa, cuánto dinero, con qué frecuencia donarlo, la afinidad al tema, rendición de cuentas y transparencia en los procesos, son aspectos fundamentales para decidirte a realizar tu donativo que, sin importar el monto, todo debe nacer desde la honestidad del propósito de ayudar.

Hoy revisamos cuatro ideas posibles para estudiantes para transformar y ser fuente de inspiración, aún podríamos enlistar muchas más. El secreto para empezar a ayudar a los demás está en sembrar la voluntad de hacerlo. Y tú, ¿cuándo empiezas?

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